Su supresión es una de las obras propuestas por la Confederación Hidrográfica para el plan de inundaciones de Trubia
Redacción/Grado
«No tiene pilares y no molesta, lo que tienen que hacer es limpiar la ribera y controlar los árboles». Los vecinos de Trubia rechazan la eliminación del puente de Quintana, un paso de hierro construido a finales del siglo XIX en la localidad, para la línea ferroviaria, hoy desaparecida. El puente se utiliza ahora como paso peatonal.
Los expertos en patrimonio industrial también ponen el grito en el cielo por la propuesta, que debe desarrollarse aún en un proyecto que está en elaboración. Toño Huerta, geógrafo y experto en patrimonio industrial trubieco, destaca el alto valor patrimonial del puente. «El puente de Quintana, también conocido como el puente “de hierro”, fue instalado allá por 1884 para comunicar el Ferrocarril del Norte con las instalaciones de la Fábrica de Armas de Trubia, en cuyos talleres fue construido. Se trata de una estructura de un solo vuelo, sin pilares, apoyada en sendos muros de piedra; se compone de cuatro grandes vigas horizontales sujetas entre sí por viguetas más pequeñas dispuestas verticalmente y reforzadas mediante roblonado por otras diagonales. Hoy en día, sin función ferroviaria, es un puente peatonal que reclama una mejora desde las riadas de 2011. Esta pequeña descripción tiene el único objetivo de dar a conocer su historia industrial y valorar su gran importancia patrimonial, reconocida por todos los estudiosos en la materia y olvidada por las diversas administraciones, que no le han otorgado aún ningún nivel de protección legal», señala el historiador en un artículo de opinión publicado en este diario, en el que defiende el mantenimiento del puente, parte de la historia de Trubia «que nos quieren arrebatar».
Deja un comentario