Un grato descubrimiento. En principio porque lo hice con la intención de aprovechar unas verduras que tenía en la nevera. Había visto la receta y la anoté en pendientes. La recordé al ver aquellas tristes mitades de calabacín y berenjena en el cajón de las verduras y la prueba está en que en cuestiones de pimientos tuve que improvisar, porque esos si que no tenía y se los tuve que poner de lata. Así que estoy segura de que con uno asado tiene que estar aun el doble de buena. El descubrimiento fue grato porque aunque mis hijos pusieron al principio todas las pegas del mundo, terminaron por repetir e incluso me quedé corta.

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• Lavamos la berenjena y el calabacín, los despuntamos y cortamos en daditos.
• Escurrimos el pimiento. Debemos eliminar los restos de piel y semillas que pueda tener. Y lo cortamos en tiras.
• Escurrimos las aceitunas y las cortamos en rodajas.
• Desmenuzamos el queso de cabra.
• Pelamos la cebolla, la picamos y rehogamos en una sartén con 4 cucharadas de aceite hasta que esté blanda.
• Añadimos a la sartén la berenjena y el calabacín y sofreímos hasta que estos también estén blanditos. Debemos remover de vez en cuando.
• Agregamos el pimiento. Salpimentamos y añadimos la albahaca (si es fresca picadita mejor).
• Cascamos los huevos en un cuento. Salpimentamos y batimos.
• Agregamos las verduras, el queso rallado, el de cabra y las aceitunas.
• Vertemos la preparación en un molde y cuajamos la tortilla en el horno precalentado a 200º unos 25 minutos nos llevará, quizás alguno más.

Por gentileza de Be cocina en el payar de Xuan