La de la iglesia no tiene acera, lo que obliga a esperar en plena carretera, y la de la fábrica es tan angosta que apenas permite bajar la rampa para minusválidos

Redacción/ Trubia

Usuarios del autobús urbano denuncian la situación de las paradas de TUA, «un peligro» que además son casi imposibles de utilizar para personas con movilidad reducida. En concreto, denuncian la situación de la parada de la iglesia y la de la fábrica, ambas en la dirección Oviedo-San Andrés. «La parada de la iglesia en sentido San Andrés no tiene acera, lo que obliga a los usuarios del autobús a caminar por la carretera con el gran peligro que ello conlleva. La parada de la fábrica, también ubicada en el mismo sentido, tiene una acera donde el ancho no es suficiente para colocar correctamente la rampa para personas con movilidad reducida del autobús. Los conductores del TUA tienen grandes dificultades para desplegar dicha rampa, además de todo ello, las personas en silla de ruedas no tienen espacio para poder girar la silla una vez se bajan del autobús. Para colmo cuando bajan del autobús no tienen margen para poder frenar la silla y se dan contra la pared de la fábrica», señalan los usuarios, que califican la situación de «lamentable».

La peligrosidad de las paradas de TUA en Trubia quedó patente en 2017 cuando un autobús de transporte regional atropelló a unas estudiantes en las inmediaciones de la parada de la iglesia. En aquel momento se decidió resolver el problema, y el Principado llegó a encargar la redacción del proyecto de «Mejora y ampliación de la travesía de Trubia», en la AS-228, que afectaba desde la rotonda de Molina hasta el cruce de La Riera. Como tantos otros proyectos que afectan a Trubia, debe de estar en algún cajón.