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Nos tocó la china
JUAN CARLOS AVILÉS

Madrid
me mata


Númberu 90. Xunetu 2022 BRANU Cada día me alegro más de haber
huido de Madrid, y de ser una hor-
#FMMF[B NJTUFSJP Z IFSNFUJTNP miguita encaramada a una brizna
de hierba en lugar de corretear, por
poco tiempo, bajo las fauces de un
&M DBTUJMMP EF 1SJPSJP FEJpDBEP FO FM 9*9 TPCSF PUSP EFM TJHMP 7*** FT insaciable monstruo de hormigón,
y además con halitosis. Las grandes
VOB EF MBT QSJODJQBMFT BUSBDDJPOFT EFM UVSJTUB RVF BDVEF B -BT $BMEBT ciudades matan. Y matan mucho
más cuando además se convierten
en lugar de encuentro de un sinies-
tro mercado de la muerte, como la
cumbre de la OTAN. Una franca-
Lucía Álvarez chela de mandamases venidos de
Las Caldas un puñado de países con la sublime
misión de ponerle puertas al campo
Ya es verano. Las Caldas se con- a base de mucha pasta para gastar
vierte en el sitio de recreo de muchos en entierros. Y todos capitaneados
ovetenses y otros tantos turistas. La por el cherif del condado, que en
belleza de la zona, el contacto con la lugar de llegar en un brioso corcel
naturaleza, fácil acceso y su cercanía (mucho más ecológico y pelicu-
a la capital, atraen a los visitantes. lero) lo hace en un sofisticado carro
Tras degustar una buena comida en de combate, tuneado de limousine
cualquiera de los restaurantes del de a sesenta litros los cien. Mien-
lugar, bien apetece un paseo a la vera tras, sus santas y lustrosas mujeres-
del Nalón. Un par de minutos cami- florero pasean el palmito por la
nando desde el paseo de Las Caldas cosa benéfico-social con la anfi-
y ya se pueden oír comentarios de triona asturiana, que matar, de todos
asombro, se ven los móviles en alto es bien sabido, ye cosa de hombres.
inmortalizando la estampa, el casti- Eso sí, luego se juntaron todos y
llo de Priorio se asoma imponente todas para profanar sin miramientos
entre la abundante vegetación. esa catedral del arte que es el
Son muchos los que preguntan a los Museo del Prado a base de fritanga
vecinos si se puede visitar, y lo cierto con pedigrí. ¡Menudo despropó-
es que no. El misterio y el herme- sito! ¡Menuda pantomima! ¡Me-
tismo rodean al edificio y no es po- Castillo de Las Caldas o de Priorio / María Suárez Naveros nudo peligro!
sible obtener una imagen del interior. serva un molino del siglo XIX y por tensiones casaderas. Pero la bella tras Olalla comenzaba a recupe- Pero si algo bueno hay que recono-
La construcción actual está docu- las fotografías aéreas intuimos un Olalla mantenía relaciones corres- rarse y quiso poner fin a la pelea. cerle a Madrid, a pesar de sus ne-
mentada desde el siglo XIV. Se edi- cuidado jardín con estatuas y una pondidas, con un guapo paje que tra- Cuando se acercó dónde estaban, fastos gobernantes, es ser una
ficó sobre una construcción antigua piscina. Según hemos podido averi- bajaba en el castillo, cuyo nombre vio el cadáver de su padre y se vol- ciudad de contrastes, y apenas
que Alfonso II ordenó erigir a modo guar la decoración es antigua, con era Pelayo y que pronto iba a ser vió loca. horas más tarde se iba a convertir,
de fuerte en el siglo VIII para refu- trofeos de caza en las paredes y fi- nombrado caballero. Mientras eso Por su parte, Pelayo, se acercó hasta como otras tantas urbes, en todo lo
giarse de Hixem I. A partir de ahí ha guras de porcelana en los muebles. ocurría, decidieron mantener su ro- Olalla, la pidió perdón por lo que contrario: la fiesta de la vida, la di-
pasado por varios dueños hasta lle- En el mantenimiento y limpieza de mance en secreto, ya que si Don Ro- había hecho, tiró su espada y se versidad y la tolerancia. De las sór-
gar a sus propietarios actuales; la fa- la fortaleza trabajan a diario varios drigo se enteraba pagaría con la arrojó desde las almenas de la torre didas imágenes en blanco y negro
milia Quijano Morenés. En una jardineros y asistentes. muerte. Como ambos se conocían del castillo, al río Gafo y en sus con olor a pólvora que carga el dia-
época perteneció al Arzobispado de «Existe una leyenda que cuenta que, desde que eran niños, no hubo nin- aguas desapareció para siempre. blo, a la exaltación de los colores
Oviedo, a la parroquia de San Juan hace tiempo vivía en el castillo de las gún tipo de sospecha. Se comenta que hay en Priorio una como reivindicación –ojalá no tu-
de Priorio, de donde viene su nom- Caldas un caballero llamado Don Pero un día que los amantes esta- roca, sobre el río, que muestra unas viera que ser así—de que la mejor
bre. En las inmediaciones del castillo Rodrigo, era un gran señor, que pro- ban paseando, apareció sin espe- manchas que llevan mucho tiempo, forma de ser iguales es admitir que
existe una placa donde figuran los venía de un buen linaje. Tenía una rarlo nadie, Don Rodrigo. El señor y que son las marcas de la sangre somos diferentes, con toda su gama
nombres de todos sus propietarios. bella hija llamada Olalla, la cual era comprendió todo en ese mismo ins- que por allí se derramó» de matices y de tesituras, de dispa-
Se construyeron dos torres a partir portadora una gran belleza. Don Ro- tante. Olalla, muerta de miedo, se A la propiedad se accede por un ridades y de formas. Bajo una única
una de las cuatro torres primitivas drigo solía visitar muy a menudo a desmayó y Don Rodrigo atacó a portón situado en la rotonda al lado bandera, la del arco iris que nos co-
que cerraban con muros el antiguo sus amistades de la alta sociedad en Pelayo espada en mano. Empeza- de Aquaxana, pero a ese privilegio rona a todos, que es la suma de
patio de armas. Las podemos con- Oviedo y considerando que su hija ron con una lucha en la que pudo sólo pueden aspirar los invitados todas las banderas. Y con la que no
templar desde el exterior sitiadas por ya tenía una edad para contraer ma- más la juventud y Pelayo dejo huér- por sus actuales dueños. Seguire- haría falta montar un circo deca-
la hiedra, y se diferencian sus alme- trimonio, la llevaba en algunos de fana a Olalla. mos imaginando cómo sería obser- dente, patético e insustancial, sim-
nas y sus ventanas de estilo gótico. aquellos desplazamientos para que Los sirvientes que se fueron con- var el valle de Las Caldas desde ple y llanamente para ver quién la
Se sabe que en el interior se con- algún noble la fuera viendo con pre- gregando, atacaron a Pelayo. Mien- una de sus torres. tiene más grande.
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