La presidenta de la IGP Ternera Asturiana cocinó junto a la presidenta de Mujeres en Gastronomía en el estand del Salón Gourmet, «la buena cocina empieza en el producto»

E. C./ Madrid

Dos veteranas cocineras. Dos presidentas que dominan los fogones. A un lado, Isabel de la Busta, ganadera y presidenta de la IGP Ternera Asturiana. Al otro, María José San Román, al mando de las cazuelas del restaurante alicantino Monastrell y presidenta de Mujeres en Gastronomía (MEG), una asociación que bajo el lema ‘El talento no tiene género’ reivindica la visibilidad del talento femenino en la cocina.

La tercera gran protagonista de la jornada fue la carne de la IGP Ternera Asturiana, la ‘excusa’ perfecta para que estas dos mujeres se juntaran y elaboraran a cuatro manos un plato en el stand de la IGP en el Salón Gourmets.

Elena Cebada, directora gerente de la IGP asturiana y organizadora del showcooking destaca que el objetivo de la actividad fue trazar el recorrido de esa cadena gastroalimentaria y mostrarlo. Desde la producción primaria de los pequeños productores ganaderos (más de 6.200 explotaciones ganaderas bajo el paraguas de la IGP Ternera Asturiana), hasta la mesa con mantel de la que disfrutan los comensales una vez el plato esté listo. “Porque la gastronomía termina en el plato, pero empieza en el origen de los productos, y son cruciales todos los eslabones de la cadena”.

La primera protagonista de esta actividad que se celebró en el Salón Gourmets fue la presidenta de la IGP Ternera Asturiana, Isabel de la Busta, que es además ganadera, conoce bien los desvelos de sus colegas asturianos por cuidar con mimo a sus animales para ofrecer un producto excepcional. “Es para mí un honor poder participar en esta actividad y ser la representante de algo tan importante para la región asturiana como es la producción de nuestra carne, quinta denominación de origen de España, y la principal del Principado”, cuenta la máxima representante de una IGP que nació hace dos décadas con el objetivo de asegurar la calidad de la carne que se produce en Asturias, certificando y garantizando el origen de las razas de vacuno asturianas y un sistema sostenible de producción. “Con nuestro sello, el consumidor tiene asegurado que el producto procede de ganaderías e industrias que se someten a un total ejercicio de transparencia para ofrecerle garantía plena de calidad, origen y forma de producción”.

Junto a la ganadera, mano a mano, estuvo otra cocinera, María José San Román, quien con el sabor del Mediterráneo como fuente de inspiración y la innovación como guía lleva una vida trabajando por redefinir los límites de una alta cocina sostenible y saludable. Pionera en el mundo gastronómico desde tierras alicantinas, San Román dirige la cocina del restaurante Monastrell (buque insignia de su grupo gastronómico, con una estrella Michelin y 2 soles Repsol) y preside además la asociación Mujeres en Gastronomía.

Ganadera cocinera y cocinera profesional elaboraron a cuatro manos el plato ‘Ternera asturiana sobre rojos’ en una colaboración muy especial: la presidenta de una de las IGPs más potentes del país y la presidenta de una plataforma que apuesta por visibilizar el talento femenino en el sector gastronómico (productoras, cocineras, periodistas), a través de acciones y actividades a nivel nacional e internacional, tejiendo una red de colaboraciones y sinergias que impulse nuevos proyectos empresariales, académicos y científicos, una red en la que los hombres también son bienvenidos.