Guardianas de la tradición somedana

El grupo de Pandereteras de Somiedo cantará un Ramu de Navidad en el Valle coincidiendo con el alumbrado navideño el 23 de diciembre

Las Pandereteras de Somiedo, en la romería de la Trashumancia

Manuel Galán / Somiedo

En la fiesta de Navidad del curso pasado en el colegio Álvaro Flórez-Estrada la profesora de inglés Clara García Menéndez, decidió representar con su alumnado ‘Un ramu de Navidad’, en lugar de la clásica canción navideña en inglés. «Es un canto tradicional de occidente. Las panderetas las hicimos con envases de pizza reciclados», comenta Clara. Tras la fiesta un montón de madres se acercan entusiasmadas y le propusieron dar clases. Es el germen del grupo de pandereteras de Somiedo. «Empecé a enseñar lo más básico y mi sorpresa fue que lo hacían muy bien. ¡Había pandereteras en Somiedo! Viendo que tenían experiencia tocando la pandereta, les propuse montar un grupo de baile. Me siguieron el rollo y aquí estamos», resume Clara.

Una de sus más acérrimas seguidoras es una de las pandereteras pioneras en Somiedo que aparece en el vídeo de recopilación del año 78. «Su compañía es garantía de que estamos cuidando la tradición de generación en generación.», concluye. Clara es componente del grupo Esbardu desde hace cinco años. De hecho, al llegar a Somiedo el curso pasado tenía la intención de apuntarse a un grupo de música tradicional, pero «me encontré que no había nada. Es algo que me sorprendió porque sabía que Somiedo es uno de los lugares dónde más esfuerzo se había hecho en la investigación y en la recuperación de relatos y cantares tradicionales, con una base documental extraordinaria. Desde el principio me enamoré de la gente, los lugares, de todo lo relacionado con Somiedo», apunta Clara. El grupo cuida, también, la estética. Y es que porque el logotipo del grupo no puede ser más singular. Lo diseñó Nieves González, profesora de Bellas Artes, habitual en los círculos tradicionales y pintora de panderetas a las que imprime un toque moderno respetando la tradición. La imagen del grupo la representa una centaura, planta protegida y endémica de Somiedo, con el dibujo de una pandereta en el centro.

Clara me comenta que «empezamos por tocar un repertorio de la zona del occidente, como la jota de Cangas, pero también de otras zonas como el Agarrao del Mazucu de Llanes». Un día de casualidad, Regino, gerente de Casa Cesáreo, alojamiento muy popular en Pola de Somiedo, les propuso hacer una actuación entre amigos en la pensión. Y así fue como en mayo hicieron la primera actuación con la presencia de la televisión pública asturiana. «A raíz de esa actuación los vídeos se empezaron a hacer virales y nos hicimos muy populares» comenta Clara entusiasmada. «Nos empezaron a llamar de diferentes sitios con el apoyo del Ayuntamiento somedano. Uno de los sitios más especiales fue la actuación en el Mercao de Noite de Somiedo, donde tradicionalmente actúan grupos muy importantes. El colofón fue cuando el Ayuntamiento nos propuso representar a Somiedo en el encuentro de las Polas, que hacía muchos años que no se celebraba. Fue en la Pola del Pino, Aller, y por primera vez vimos nuestro nombre en un cartel, junto a gente muy top del folklore asturiano, como la Banda de Gaitas del Gumial». Las panderetas somedanas tienen su canción. Es la jota del Valle. Para Clara «tiene un ritmo muy rápido, es un sonido muy ancestral». Además Somiedo tiene una particularidad y es que es el único lugar donde la pandereta se toca con el puño. Esta canción la tocamos así, con el puño y a un ritmo trepidante.»

Si bien el los 80 se registró mucha de la tradición oral de Somiedo, en este segundo año el grupo está consiguiendo integrarla en el día a día de la gente, que forme parte de su vida cotidiana. «Es lo especial que hacemos haber traído de vuelta la música y el baile tradicional. Son canciones como la Juliana, los pollos, el Arredore, la jota del Valle que aparecen en el vídeo de Somiedo del año 78 y que cobran vida cuando escuchas a gentes de Somiedo cantarlas. Es nuestro objetivo este año, que la música popular y somedana vuelva a las calles y a las gentes». Un año después, el grupo cantará un Ramu de Navidad en el Valle coincidiendo con el alumbrado navideño el 23 de diciembre. Esta vez no será en el colegio ni con las nenas, si no con el grupo al completo. Encargaron un ramu tradicional en la vecina Babia, donde hay mucho vínculo con la gente de Somiedo. Por primera vez se vestirán con el traje tradicional.

A estas más de 20 mujeres y niñas les gusta decir que son las guardianas de la tradición. Y es verdad. No hay mejor forma de recuperar la tradición oral que hacerla viva entre las gentes.

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