Josefa Viejo Viejo había nacido en Bermiego en 1915
Beatriz Álvarez / Quirós
Hoy ha fallecido en la residencia de Bárzana la ‘abuela de Quirós’, Josefa Viejo Viejo, a la edad de 105 años.
Josefa Viejo Viejo nació en la primavera de 1915 en Bermiego,en una familia de cuatro hermanos, Josefa, Rodrigo, Sinda y Sagrario, gente trabajadora y emprendedora, valores que hoy han heredado sus descendientes. Dicen los que la conocieron que tuvo que jugar a despistar al hambre y otras vicisitudes peores durante la Guerra Civil. Casada con Guillermo González, su marido luchó en el frente del Ebro donde lo hirieron y al volver a casa para recuperarse prefirió “morir junto a los suyos” que regresar al frente de una guerra que robaba lo mejor de cada casa desangrando. Esta decisión le obligó a echarse al monte.
A Josefa entonces la detuvieron y la llevaron a la ‘iglesiona’ en Gijón donde siguió sumando penalidades al tiempo que crecía como mujer valiente. Sin embargo, no fue la guerra la que ponía punto y final a su matrimonio sino la silicosis que se llevó prematuramente a su esposo a la edad de 47 años. Y ahí Josefa echó el resto para sacar adelante a sus dos hijas: Isolina y Mari con las que más tarde se trasladaría a Oviedo.
Trabajadora sin descanso, mujer sola y viuda, “hombre y mujer de la familia” decía a menudo, ama de casa y ganadera, ejemplo de una raza de luchadoras de las que ya van quedando pocas. Con Josefa se va parte de la memoria y la historia del concejo, una mujer de carácter que ha cumplido con amplitud el centenar de años y que en los últimos años regresó a su concejo, no siendo raro encontrarla en su silla de ruedas al solín de la terraza del Josmay a la hora del vermú los domingos con alguna de sus hijas o nietos.
Deja dos hijas, seis nietos y un montón de bisnietos que mantendrán vivo su recuerdo. Desde estas páginas nuestro abrazo a su familia, en especial a Auri de la Librería Elías.
Mañana domingo, día 24, a la una de la tarde, se celebrará el funeral de cuerpo presente en la iglesia parroquial de Santa María de Bermiego, Quirós, en la más estricta intimidad familiar.
Deja un comentario