Los vecinos piden elementos para obligar a los conductores a cumplir los límites, «es un peligro»
Redacción / Trubia
La calle de acceso a Soto, en Trubia, es “un auténtico peligro”. La vía, un tramo recto por el que en su día pasó el ferrocarril, es de sentido único, y se ha convertido en una especie de pista de carreras. “Los coches pasan a una velocidad de infarto. El otro día tenía apoyada la bici en el muro de mi casa y me la tiraron de la fuerza con la que van”, denuncia uno de los afectados, que ha transmitido la queja a la Policía Local. “Me dice que ponga la denuncia en Oviedo”, lamenta el residente.
Los coches cogen velocidad en el tramo, recto, y derrapan al final, en la llegada a la localidad, un riesgo que aumenta por la falta de visibilidad a causa de los matorrales. “Por aquí no vienen a desbrozar y hay tramos de acera invadidos. La gente tiene que salir a la calzada para pasar, y los coches pasan a toda mecha”, denuncian los vecinos, que piden badenes de control.
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